7/5/08

Quien se rinde...

Por la blanda arena que lame el mar,
su pequeña huella no vuelve más,
un sendero sólo de pena y silencio llegó
hasta el agua profunda,
un sendero sólo de penas mudas llegó
hasta la espuma.
Sabe Dios que angustia te acompañó,
qué dolores viejos calló tu voz,
para recostarte arrullada en el canto
de las caracolas marinas,
la canción que canta en el fondo oscuro del mar
la caracola.

Te vas Alfonsina con tu soledad
¿qué poemas nuevos fuiste a buscar?
una voz antigua de viento y de sal
te requiebra el alma, y la esta llevando
y te vas hacia allá como en sueños,
dormida, Alfonsina, vestida de mar ...
Cinco sirenitas te llevarán
por caminos de algas y de coral
y fosforecentes caballos marinos harán
una ronda a tu lado,
y los habitantes del agua van a jugar
pronto a tu lado

Bájame la lámpara un poco más
déjame que duerma nodriza en paz
y si llama él no le digas que estoy
dile que alfonsina no vuelve ...
y si llama él no le digas nunca que estoy,
di que me he ido.
Te vas Alfonsina con tu soledad
¿qué poemas nuevos fuiste a buscar?
una voz antigua de viento y de sal
te requiebra el alma y la está llevando
y te vas hacia allá, como en sueños,
dormida, Alfonsina, vestida de mar ...

Alfonsina Storni
Web de Alfonsina Storni en la Biblioteca Virtual Cervantes

En 1936 se suicida Horacio Quiroga y ella le dedicó un poema de versos conmovedores y que presagian su propio final:

Morir como tú, Horacio, en tus cabales.
Y así como en tus cuentos, no está mal;
Un rayo a tiempo y se acabó la feria…
Allá dirán.
Más pudre el miedo, Horacio, que la muerte
Que a las espaldas va.
Bebiste bien, que luego sonreías…
Allá dirán.