27/4/08

Cantar de los Cantares

Desde los primeros versículos del Cantar de los Cantares, nos seduce el milagro de un amor libre, lúdico, sensual, comunicativo, ingenuo, personal... Los amantes enfatizan la mutua pertenencia: "Yo soy para mi amado, y mi amado es para mí" En ningún momento se describen órganos o acciones abiertamente sexuales, pero existe un divertido, sutil juego de simbolizaciones que, a modo de acertijo, sugieren erotismo y complicidad.

Mi Amado para mí
Ya toda me entregué y di
Y de tal suerte he trocado
Que mi Amado para mi
Y yo soy para mi Amado.

Cuando el dulce Cazador
Me tiró y dejó herida
En los brazos del amor
Mi alma quedó rendida,
Y cobrando nueva vida
De tal manera he trocado
Que mi Amado para mí
Y yo soy para mi Amado.

Hirióme con una flecha
Enherbolada de amor
Y mi alma quedó hecha
Una con su Criador
Ya yo no quiero otro amor
Pues a mi Dios me he entregado
Y mi Amado para míY yo soy para mi Amado.

LIBRO CANTAR DE LOS CANTARES