25/10/08

Drácula (Francis Ford Coppola, 1992)

-He cruzado océanos de tiempo para encontrarte.

-Bienvenido a mi morada. Entre libremente, por su propia voluntad, y deje parte de la felicidad que trae.

-Te amo demasiado para condenarte.
-Confío en que sabrá disculparme por no acompañarle, pero yo ya he cenado. Y jamás bebo... vino.